El pasado domingo 7 de octubre, se presentó en Nuestra Casa Hermandad, el cartel para la conmemoración del 75º Aniversario de la imagen del Stmo. Cristo Yacente, realizado por nuestro paisano D. David Gómez López, Técnico en dorado y policromía en grabado calcográfico y en escultura, que actualmente cursa el grado de Bellas Artes en la Universidad de Sevilla.
En su presentación, David, nos daba la siguiente explicación del mismo…
Reverendo Señor Cura Párroco, reverendo Señor Vicario Parroquial, Hermano Mayor y miembros de la Junta de Gobierno de esta querida Hermandad del Santo Entierro de Cristo y Nuestra Señora de la Soledad, delegado de hermandades y demás miembros de las diferentes hermandades de Mairena que hoy nos acompaña, hermanos y amigos todos. Buenas tardes.
La pintura que presento está realizada con la técnica del óleo sobre lienzo, con unas medidas de 60 x 92 cm. Es una obra cargada de símbolos y detalles, teniendo cada uno su correspondiente significado y que a continuación voy a explicar más específicamente.
En primer lugar, hay que destacar el conjunto cromático elegido, siendo el más acorde con el espíritu de la Hermandad. El principal protagonista es el negro, característico por ser el color que predomina en el hábito de sus hermanos nazarenos, quiénes acompañan cada Sábado Santo la bendita imagen del Señor. También es el color del manto que arropa a su Madre, Ntra. Sra. De la Soledad. El negro, refleja el carácter austero, humilde y a la vez elegante, que esta Hermandad nos deja en su discurrir por las calles de Mairena. El Señor, ante ese fondo oscuro, es como la luz que guía nuestros pasos.
La composición es sencilla y vertical, en la cual, se quiere anunciar la efeméride que estamos celebrando, el 75 aniversario de la actual imagen del Santísimo Cristo Yacente salida de las manos de D. Manuel Galiano Delgado, que fue bendecida por el Sr. Cura Párroco de entonces, D. Enrique Purqquer Oropesa el 18 de abril de 1943, Domingo de Ramos.
Por lo tanto, quien protagoniza el cartel es el Santísimo Cristo Yacente que aparece representado en el centro de la composición.
Pocas veces se ha interpretado la imagen del Señor de la forma que aparece en la pintura. Pero aprovechando la ocasión extraordinaria, decidí colocarlo así, de un modo distinto a como estamos acostumbrados a verlo. El Señor aparece en el momento de ser bajado de la cruz, uno de los actos de culto más importantes, y con más arraigo para los soleanos, celebrado cada madrugada del Sábado Santo, como es, el Sermón de Descendimiento.
Se trata de un momento con una fuerte carga de emoción para todo el que contempla, como es descendido y presentado a su bendita Madre de la Soledad, siendo posteriormente colocado en la urna. Una tradición muy antigua, pues es en la primera mitad del siglo XVIII, cuando por primera vez se cita al Santo Entierro de Cristo como titular de esta Hermandad, y lo hace precisamente haciendo referencia a un Sermón que se celebraba en la procesión del Viernes Santo. Una costumbre que pasó por algunas vicisitudes, siendo prohibida en el año 1755, desapareciendo en 1963, y que desde 1987 fue recuperada y ha cobrado una gran importancia con el paso del tiempo para nuestra Hermandad y nuestro pueblo.
Podemos observar al Señor introducido en el escudo de nuestra Hermandad, en el cual, se representa el triunfo de la cruz sobre la muerte en el calvario: La cruz, el sudario que lo envuelve y las dos escaleras de los Santos Varones, alusivas al descendimiento. A los pies aparece el símbolo del amor sin medida, del amor por excelencia, reflejado iconográficamente en la imagen del pelicano que abre su pecho para alimentar a sus hijos, como Cristo que derramó su sangre por todos para redimir al mundo. Siendo esta imagen del pelicano también muy significativa y alusiva a la Hermandad del Santo Entierro.
Sobre el monte rocoso del Calvario encontramos distintos símbolos y elementos cargados, como dije inicialmente, de significados: la corona de espinas que llevó Nuestro Señor, un clavel como símbolo de la sangre derramada en la cruz y un lirio, signo de penitencia. La muerte, personificada en la calavera de Adán, la serpiente con una manzana en la boca que se enrosca en la esfera terrestre, simboliza la entrada del mal en el mundo a través del pecado original.
Todo ello en conjunto, nos lleva ala reflexión sobre el principal mensaje para el cristiano: el de la Resurrección. El cual se refleja, en la leyenda en latín que rodea la cabeza del Señor a modo de aureola. Y dice así: Mors Mortem Superavit, que significa, “la muerte venció a la propia muerte.”
Por último, al fondo de la composición aparece la urna del Santísimo Cristo Yacente, elemento identificativo, sin duda, donde se guarda como un tesoro, cada Sábado Santo, el cuerpo de Nuestro amado titular.
Sobre el cristal de la urna apreciamos un reflejo. El reflejo de la que ha sido y es su casa en estos 75 años de su llegada a Mairena, la Capilla del Santísimo Cristo de la Cárcel. Y también, el lugar donde nos encontramos hoy, un sueño hecho realidad por sus hermanos, la casa de todos los soleanos, nuestra Casa Hermandad.
Para concluir, me gustaría agradecer a la Junta de Gobierno de esta querida Hermandad, la confianza que han depositado en mi persona por la realización de este cartel, para conmemorar tan importante efeméride, el cual, ha sido para mí llevado a cabo con mucha ilusión.
Espero que haya sido del agrado de todos.
Muchas gracias a todos.